A una hora y media de Lima, en el desvío ubicado en el km. 80, de la playa León Dormido, se inicia la aventura Florina, en la que recorremos los pueblos de Azpitia y Santa Cruz de Flores. Entre ambos lugares, se encuentra el "Balcón del Cielo", lugar de donde se logra una impresionante vista de todo el valle de Mala.

El "Picante Florino" y la famosa "Sopa Bruta" (carapulcra con sopa seca), son los potajes abanderados de esas zonas y para deleitarse con buenos postres sus picarones florinos preparados, a diferencia de los limeños, con yuca y camote, o si prefiere algo más fresco para bajar el calor de la región, están las famosas cremoladas de pura pulpa de frutas.

Visitamos cuatro bodegas familiares, caracterizadas por sus licores a base de pisco, como macerados, cremas y piscafé.

Hora de partida de Lima: 08 a.m.

Hora de llegada a Lima: 06 p.m.

Un solo lugar de recojo y de retorno a acordar.

Una ruta caracterizada por la variedad de sus bodegas pisqueras ubicadas en Quilmaná, Imperial y Nuevo Imperial. Cada una con una característica que la diferencia de las otras: Caballo de Paso, falca rectificada, producción semi industrial, entre otros puntos, además de sus productos diversos y suvenires.

Para el almuerzo, recomendamos el Piqueo Criollo compuesto de cinco variedades de potajes de la zona, entre los que recomendamos Arroz con Pato y la Sopa Seca.

Otros lugares de parada son las plazas principales de Quilmaná y Nuevo Imperial.

Hora de partida de Lima: 08 a.m.

Hora de llegada a Lima: 07 p.m.

Un solo lugar de recojo y de retorno a acordar.

Por Denominación de Origen, el valle de Lunahuaná, es el único lugar del Perú donde puede producirse el pisco de la cepa Uvina, lo conforman los pueblos de Lunahuaná, Pacarán y Zúñiga.

Además, es la única localidad de la región Lima donde el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo a otorgado a cinco bodegas, el título de Oficiales, creandose por ello una Ruta Oficial del Pisco.

En nuestro recorrido, visitamos dos bodegas artesanales y dos bodegas oficiales, con la finalidad que los pasajeros distingan las diferencias que se dan entre ambos ejemplares, lo cual, no implica la calidad de los productos.

Como es una zona amplia, cuenta con varios anexos, cada uno de ellos con bodegas artesanales singulares, por lo que en nuestro trayecto podremos visitar desde el ingreso al distrito de Lunahuana, en el km. 26, hasta el desvío a Catapalla, en el km. 44.

La mayoría de las bodegas cuentan con alambique y terrenos en donde el público asistente podrá conocer el proceso de producción in situ.

También damos un tiempo para que los pasajeros visiten la plaza principal de Lunahuaná, donde se encuentra su Iglesia, una feria permanete de artesanías y una zona de venta de coctelería preparados con piscos de la zona.